29 enero, 2011

Celebrando con Fé



¿Saben cuantas tomas se necesitan para obtener una foto familiar cuando se tienen tres hijos pequeños? ¡Más de una docena! Y aún así no logramos que todos salieran sonriendo. 


La sesión de fotos fue toda una aventura, pero también una magnifica manera de celebrar el cumpleaños de mi esposo. Realmente necesitabamos un momento alegre en familia para apreciar las bendiciones del Señor.



De regalo de cumpleaños al niño grande de la casa le confeccioné un Sackboy (Little Big Planet) que encontré en Nerdigurimi.

Bueno me falta ponerle el zipper y la sonrisa, pero igual le encantó al cumpleañero.






Aunque no tanto como el regalo de Melissa: una sonrisota tipo momento Kodak.




El Señor nos han abierto tantas puertas y hemos sido ayudados por tantos ángeles en estos momentos difíciles, que pudimos sinceramente disfrutar con fé en que pronto celebraremos la recuperación de Meli.




25 enero, 2011

Tejiendo Esperanza

Mientras bañaba a Melissa ayer por la tarde para ir a una segunda opinión tuve un dejavu, hace casi una semana estaba en la misma situación cuando todo se desencadenó, pero esta vez estaba más tranquila pensando en que esta sería una tarde de buenas noticias.

La vestí muy coqueta, no se porque desde pequeña siento menos miedo en situaciones difíciles si me gusta como me miro, así que verla me daba un poco de paz, como si a un angelito tan lindo no le pudiera pasar nada malo.

En la sala de espera comencé a tejer un honguito y con él esperanza, la que aumentaba mientras oraba por Meli. Me parece mentira que ya esté haciendo sus primeras sonrisas, que han pasado casi desapercibidas entre tanto alboroto.

La atención fue excelente, nada de alambres traumáticos para ella y nosotros. El diagnóstico el mismo, catarata unilateral, probablemente congénita, ningún indicio de retinoblastoma (no me canso de agradecerte Señor).

El dr. nos explico que la operación es sencilla y la recuperación fácil, sin lentes de contacto y que ocuparía una segunda operación a los 5 años para colocar un lente intraocular. Verá normalmente, si Dios lo permite. Nos dio mucha paz.

Le comentamos como el año pasado Daniel se enfermó con la H1N1 y la recetaron Tamiflú, y que Miguel y yo también la tomamos por prevención para no contagiar a Paola que solo tenía 1 año. Yo me hice la prueba de embarazo y resultó negativa, sin embargo 3 semanas después me di cuenta que estaba embarazada, probablemente de un par de días cuanto tomé Tamiflú. El opina que probablemente eso causó la catarata en Melissa, ya que medicamentos similares le han provocado rechazos de cornea a otros pacientes. Eso coincide con la opinión del primer médico que visitamos.

No es momento de pensar en lo que pudimos hacer distinto, jamás me hubiera imaginado que estaba embarazada y lo que podría pasar, fue una decisión que en su momento tomamos para el bienestar de Dani y Pao. Como nos dijó el Parroco de San Vicente, no debemos culparnos por las decisiones que tomamos mal si lo hacemos por amor, esos sentimientos no vienen de Dios. En lugar de eso de cierta forma me tranquiliza pensar que si fue el Tamiflú los exámenes de enfermedades genéticas no revelarán nada malo. 

Ahora nos queda seguir orando para las decisiones que vienen, para que Dios nos ilumine el camino que debemos tomar. Son tantas las preguntas que responder, ¿quien? ¿cuando? ¿donde?

Ayer pensaba que sería más fácil si pudieramos preguntarle al Señor que hacer y el nos respondiera con claridad, como si nos hablara cara a cara. Buscando paz abrí la biblia online en la lectura de hoy Martes:

Hechos 22,10-13 "Entonces yo pregunté: «¿Qué debo hacer, Señor?» Y el Señor me respondió: «Levántate y vete a Damasco. Allí te hablarán de la misión que te ha sido asignada.» El resplandor de aquella luz me dejó ciego, y entré en Damasco llevado de la mano por mis compañeros. Allí vino a verme un tal Ananías, un hombre muy observante de la Ley y muy estimado por todos los judíos que vivían en Damasco. Me dijo: «Saulo, hermano mío, recobra la vista». Y en el mismo instante pude verle."

El Señor siempre nos responde...

23 enero, 2011

La Terapia de mi Aguja

El miércoles por la tarde terminaba de escribir mi segundo post y pensé agregarle una encuesta para hacer el blog más interesante cuando Melissa se despertó, así que dejé el post salvado para publicarlo más tarde. 
No podía dejar de pensar en la sombra que le había notado en el ojo a Melissa. No le di importancia la primera vez que la vi, pero el Domingo Oscarina, una amiga, también la notó.
Obviamente se lo comenté a mi esposo, quien después de buscar en internet información estaba muy nervioso, todo lo que encontraba al respecto era de Retinoblastoma, un cancer en el ojo. Quienes me conocen saben que no me alarmo con facilidad así que comencé a tranquilizarlo, "en internet uno siempre encuentra lo peor" -le dije- "seguramente no es nada".
Tenía planeado ir a Indigo, para retomar la producción de Coti's, por lo que comencé a alistar el baño de Meli. Ya le había consultado al pediatra por teléfono sobre la sombra, él me tranquilizó diciendo que no era nada urgente, y como solo faltaba una semana para la cita de vacunas, podría revisarla allí. Pero porque no podía dejar de pensar en ella, casi no se le notaba en la luz del día, talvez ya se le había quitado, pero... ¿y si estaba equivocada?
Al comenzar a bañarla se me ocurrió tomar un foco para verle mejor el ojito, sentí que el corazón se me detenía al observar que con la luz artificial la pupila se miraba blanca. Solo terminé de bañarla y corrí a la computadora a buscar en internet, Miguel tenía razón, todo lo que encontraba era Retinoblastoma, quistes y cataratas.  
Llamé a Miguel y llevamos a Melissa al pediatra. Después de examinarla confirmó que tenía Leukocoria (pupila blanca) y que podría ser lo que ya temíamos, debíamos llevarla al oftálmologo de inmediato. Nos consiguió una cita para el día siguiente en la mañana. Señor que no sea cancer.
Nos fuimos a casa con el corazón en la garganta, con mucho esfuerzo y la voz entrecortada pude contarle a nuestros familiares y pedir cadena de oración a nuestros amigos cercanos y hermanos de comunidad.
Fue una de las noches más largas de mi vida.
El Jueves nos fuimos a la cita con fe en que todo saldría bien. El oftálmologo nos tranquilizó con su trato amable. Primero le realizó un fondo de ojo, fue duro verla con alambritos sosteniendo sus ojitos abiertos; luego un ultrasonido, para el que se durmió cansadita de llorar. Valió la pena el sufrimiento cuando le escuche decir al dr. que no podía ser Retinoblastoma. Gracias Señor.
Su diagnóstico: una catarata, el tratamiento: cirujía, cuando: antes de sus cuatro meses. También era necesario hacerle un examen de sangre especial llamado tamizaje para descartar que una enfermedad genética o metabólica causara la catarata. Los resultados nos los entregarán hasta dentro de quince días.
Nos fuimos a casa aliviados de no tener que pensar en cancer, pero todavía tristes, una operación a nuestra bebita seguía siendo algo serio y habían tantas cosas que pensar, quien la operará, con lentes intraoculares o de contacto, ni siquiera entiendo bien las opciones, y Señor por favor, que no salga nada en el examen.
Ha sucedido todo tan rápido que a veces me parece mentira, pero después de orar y ponernos completamente en manos de Dios, estamos más tranquilos. Poco a poco hemos vuelto a la normalidad, es lo único que podemos hacer mientras esperamos los resultados de los que dependemos para tomar cualquier decisión. Reunirnos con nuestros amigos el viernes por la noche nos hizo sentir que todo estaba bien, y la intercesión de nuestra comunidad por la sanación de mi muñeca nos llenó de esperanza.
En un post de FB de Etsy alguien compartió que cuando hace alguna manualidad ora por quien la va a recibir, me encantó la idea y en ese momento pensé incorporarla a todo lo que hago para Coti's. 
Ahora me parece particularmente importante orar mientras tomo mi aguja para hacerle una rosa fuchsia a Paola y a mi princesita Melissa una Mariquita.
Esta semana el crochet ha pasado de ser solo mi pasión a ser mi terapia.

Primera Desventura


Ok, y ahora ¿como aterrizo las ideas de colores que vuelan en mi cabezita con brillos de swarovski? 


Después del frenesí de bajar patrones, probarlos en mil colores, tomar tiempos, sacar costos, tomar fotos, hacer muestrarios, era hora de buscar donde venderlos, ya había hecho la página de Facebook, pero sabía que eso no iba a ser suficiente, tendría que visitar tiendas.

Eso si era un reto, marketing en vivo y en directo no es mi fuerte, una cosa es que mis familiares y amigos reciban mis creaciones con entusiasmo y otra muy distinta convencer a un extraño de que le conviene vender Coti's.

En la primera tienda me recibieron con recelo, pero no me rendí y después de un rato estabamos viendo fotos de su nueva colección de vestidos de bebe y diseñando ganchitos que combinaran.

Muy animada me pase la noche aguja en mano para entregar las muestras lo antes posible; fue un poco desalentador que no estuvieran en la tienda cuando fui a dejarlas y más aún cuando por correo me informaron que ya no estaban interesados y que pasara a recoger los ganchitos.

Dos días después me sorprendió ver en mi feed de Facebook fotos de las maripositas, primero pensé que habían cambiado de opinión pero se miraban distintas, no eran las mías. Sentí fuego en mi cara mientras me daba cuenta de lo que significaba: las muestras eran para copiarlas!!! Me sentí usada, frustrada y como diría mi papi, encachimbada.

Después de muchos "bienvenidos" (oración ante dificultades) y bloquear el "fan" de la página de Coti's, decidí tomar el "high road" y no hacer nada más que orar. Bueno no pude evitar espiar a través de mis hermanos a que precio los vendía ;) soy humana después de todo.

La oración funcionó porque en Baby's Corner y en Indigo me recibieron muy bien y comencé a trabajar en modelos para adultos.

A pesar de mi primera desventura, con la ayuda de Dios renové mis deseos de seguir luchando por el sueño de trabajar en algo mío y que me apasione, después de todo es la dificultad de la oruga al salir del capullo lo que le fortalece sus alas para poder volar...

17 enero, 2011

El comienzo de Coti's...


TGIM!! No hay como el viernes, pero el lunes tiene su encanto, Daniel, mi hijo de cinco años, derrocha energía en la escuela y el almuerzo está hecho gracias a mi mami que todos los fines de semana me visita con cacerola en mano, mi hija Paola de casi dos años duerme su siesta matutina en su cuarto y mi bebe de dos meses Melissa duerme una de sus muchas cortas siestas a mi lado, así que con el dulce sonido del silencio comienzo mi día.

Acabo de cumplir los 40 días oficiales de descanso después de tener un bebe y es hora de retomar la venta de ganchitos, supongo que debería empezar por sacar los costos de mis nuevos modelos, tarea que he estado procrastinando desde hace un par de días... nahh será en la próxima siesta de Melissa, en lugar de eso redactaré  mi primera aventura de crochet: el nacimiento de Coti's

Hace unos cuantos meses, comencé el tercer trimestre de mi embarazo de Melissa, y con él mi acostumbrado "nesting syndrome" que según los expertos padecen (o disfrutan) muchas mujeres en sus últimos meses de gestación y básicamente es una urgencia de hacer y hacer y hacer, como los pajaritos que preparan su nido.


Yo he disfrutado mi "nesting syndrome" en mis tres embarazos, con Daniel limpié la casa, o micro-apartamento en aquel entonces, costuré el movíl de la cuna con muñequitos de Nemo y le cambié el encaje al mosquitero; con Paola costuré vestiditos, zapatitos, pinté el cuarto (bueno el pintor lo hizo) y pegué calcomanías de pared; y con Melissa tenía la buena intención de hacer un par de zapatitos de crochet y si me salían bien me animaría al gorrito y vestidito.



El problema es que no tomaba una aguja desde hace casi quince años y no encontraba ninguna revista con un patrón que me gustara, así que hice lo normal cuando uno no encuentra algo, abrí el navegador de internet y me dirigí a www.google.com :) pero todo lo que encontré eran patrones escritos, sin diagramas, y hace quince años solo hacía crochet con diagramas.

Ni modo, esto no pararía mi nesting syndrome, tendría que aprender a hacer crochet con patrones escritos en inglés, pero ni loca comenzaría con un traje de gorro, camisita y zapatitos, así que Google al rescate de nuevo, a buscar algo pequeño; así fue como encontré en Little Birdie Secrets unas mariposas tan lindas y en otros sitios flores y un sin fin de cositas que hicieron que me enamorara de nuevo de mi aguja de crochet.

Mi cabezita empezó a ver posibilidades, Melissa se vería bella con un par de maripositas si en lugar de oruguitas de hilo tuvieran piedritas de swarovski, y Paola que es tán coqueta luciría preciosa con una rosa que tuviera una perla en el centro,  pensandolo bien, a mi me caería muy bien una rosa con plumas para el cabello o quizas en un broche para darle vida a una camisa... y porque parar allí, también podría venderlas, los ganchitos de cinta grosgrain y de flores de seda están muy de moda, y nadie hace de crochet en nuestra ciudad... todavía.


Y como maripositas de crochet fueron volando mis ideas y de repente me encontré buscando un nombre para un nuevo negocio, y ya que fue Melissa quien indirectamente comenzó todo, me pareció apropiado (y cute) usar el apodo que con cariño usamos con mi esposo para nuestros tres hijos: "Coti" que se originó de cosita linda, cotita y bueno coti al final.

Y así comenzaron mis aventuras en crochet, con flores y maripositas que inspiraron mi creatividad para hacer accesorios de pelo con cristales y perlas que le dan un toque de glamour moderno al viejo arte del crochet.

PD. Todavía no comienzo a hacer el par de zapatitos de crochet ;) ¡quizas en otra aventura!